Maru Botana, reconocida cocinera y empresaria argentina, se encuentra en un momento de gran exposición mediática. A pocos meses de su debut como jurado en 'Bake Off Famosos', su vida personal, tanto los momentos alegres como los más difíciles, acaparan la atención del público.
La Impresionante Mansión de Maru Botana en Tigre
Lejos del bullicio de la Capital Federal, Maru Botana eligió un exclusivo country en Tigre, provincia de Buenos Aires, para construir su hogar junto a su marido y sus siete hijos. La propiedad, revelada a través de la cuenta de X 'RicosyFamososOK', cuenta con seis habitaciones y amplios espacios diseñados para la comodidad y la convivencia familiar. El estilo, según se describe, es acogedor y funcional, buscando crear un ambiente donde cada miembro de la familia pueda disfrutar de su privacidad y, al mismo tiempo, compartir momentos juntos.
Gracias a sus publicaciones en redes sociales como Instagram y YouTube, sus seguidores pueden apreciar la magnitud de la propiedad y algunos detalles de su decoración. Maru Botana ha procurado crear espacios destinados al entretenimiento y la relajación, buscando fortalecer los lazos familiares.
El Eterno Recuerdo de Facundo
Cada 21 de septiembre, Maru Botana se enfrenta a un aniversario doloroso: la muerte de su hijo Facundo. A 17 años de su partida, la cocinera compartió un emotivo mensaje en Instagram, recordando a su bebé con profundo amor y tristeza.
“Hoy es el día. El día en que si pudiera volvería todo para atrás, o el día que desearía que nunca hubiese existido”, escribió Botana, expresando el dolor que persiste a pesar del paso del tiempo. Recordó el difícil momento de comunicar la noticia a sus otros hijos, quienes eran muy pequeños en ese entonces.
A pesar del dolor, Maru Botana encuentra consuelo en el recuerdo de Facundo y en el amor de sus otros hijos. “El siempre está y lo siento en cada uno de mis hijos, me acompaña y nos cuida”, afirmó. Su testimonio conmueve y genera empatía en quienes han experimentado pérdidas similares.
La vida de Maru Botana, entre recetas, proyectos profesionales y la crianza de sus hijos, también está marcada por un dolor que nunca desaparece, pero que aprende a sobrellevar con amor y entereza.